sábado, 13 de julio de 2013

Palabras de enamorados

Súbete a la noria de mi amor,
Y recita esto que está escrito:

Te quiero, como diría un amigo;
Te amo, como dirían los amantes.
Sin embargo, yo, te necesito conmigo;
En cada segundo, más fuerte que antes.

No quiero escribirte algo, porque jamás se haya escrito,
Ni dedicarte el verso más bonito, tampoco el más escaso.
Lo que te diga, que sea susurrado en tu oído,
Y tiernamente, arme guapa en tu regazo.
Con la calma y el alivio que expreso, al estar contigo
Para que me llene tu beso, y me resguarde con tu abrazo.

No deseo contarte sueños ni leyendas sobre estrellas,
Ni esperanzas de lo más tiernas y estremecedoras.
No quiero cantarte canciones bellas,
Ni regalarte las más dulces amapolas.

No quiero hacer ninguna de esas cosas, caballero;
Tampoco sorprenderte, con un texto perfecto, ni brillante
Porque si vivo es para quererte, y yo te quiero
Que eso es lo importante.
Más que la salud y el dinero.
Más que la misma vida, la muerte,
El pico de la luna y el sol entero.
A parte, sin nubes, tú eres el cielo; sin caminos, mi sendero.

Eso es lo bonito de quererme, que es el motivo de yo amarte.
Deseo verte, cuidarte con mi afecto, jamás subestimarte
Sentir tu aliento, dulce hombre, valeroso andante;
De largo viaje, compañero.

No habrá poema ni palabra, para expresarlo
Sólo así sabrás la fuerza, de lo que te hablo.

No sé cómo decir que eres la combustión de mi azufre.
Eres el viento que viene y calma,
Mi azul llama; sin ti, mi corazón sufre.

Eres silencio, que se oye en los hombres que amaron
Mi alma, déjame tu travieso beso,
Y lo devolveré dulce; tal cómo me lo prestaron.

Para mí, el amor es suculenta delicadeza.
Ojalá tú también me puedas amar,
Para que consigas saborearlo;
El sabor y vestimenta de la certeza
Al con pureza expresar
Lo muchísimo que te amo.

Y si te digo:
Una gota de agua, se precipita por la hoja de una rosa
Cada una que lloro cuando muero, al vivir.
En mi hoja y en mi alma; en mi alma y en mi prosa,
Al mojar tristeza, y tinta derretir
Ella no mancha, que decora
Mi palabra hermosa, de cuando cielo, estoy sin ti.

“Eres un sueño; por eso despierta estoy sin ti”
Sólo tengo tus labios y tu mira,
Que me incitan en la memoria
Y mi corazón con ira,
Que se desangra en otra lágrima sin victoria
Cuando me falta la vida,
Y yo muerta, sólo te puedo escribir.

Te quiero, cuidadoso pétalo empapado
Súbete a esta noria,
Porque mis tristezas forman parte de la historia...
Te amo, sólo tú me haces vivir.
Y sin ti, con o sin dolor ya, mi amado,
Sin ti, vida mía, sólo queda morir.
Subiremos y bajaremos, pero en cada altura, te daré un beso.
Más tierno que el sueño, más grande que el existir.
Más bonito que todo eso;
Te necesito ahora, y te prometo, que siempre será así.

Es sólo una de cientos de formas para decirte que te quiero a mi lado, siempre, y para siempre, contigo;  aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario